Empezar. Un libro, una canción, a hacer surf, a bailar, a tocar la guitarra, a hacer parapente. Da igual. Pero empezar. Viajar. A sitios con los que soñaste, cercanos o lejanos… Y dejarse sorprender por pequeños rincones que nos emocionan al pasar.
Empezar un año. Volver a hacer escalada, retomar las buenas costumbres, lo que te hace bien. No apoltronarse, no conformarse, salir de la zona de confort. Conocer a nuevas personas, visitar nuevos museos, conocer otras cafeterías. Escuchar música que nunca antes has escuchado. Enriquecerse con cosas nuevas. Salir de tu barrio, de tu ciudad, de tu entorno, de lo que te rodea a diario.
Empezar. A escribir un libro, una poesía, un cuento, una canción. A ir al teatro, a la ópera, quedarse absorto viendo una actuación callejera y echar dinero. Sí, echar dinero a esos artistas anónimos. Creer en el arte del que crea algo hermoso de la nada.
Empezar. Como un bebé a gatear. Un curso de dibujo, de fotografía o a hacer manualidades con washi tape. Qué más da. Mientras empiezas algo mantienes las ganas. Y si no, que se lo pregunten a las rubias…
Feliz Año. Siempre hay una oportunidad para empezar de nuevo…
Me gusta muchísimo comenzar